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jueves, 25 de agosto de 2011

BIOMECANICA EN EL CALZADO PARA DIABETICO

La Importancia de la Biomecánica en el Calzado para Diabético Imprimir E-Mail
escrito por Dr. Jorge E. Puerta Q. Cirujano - Atención de Pie   
La Diabetes Mellitus es una enfermedad muy devastadora si no se tiene un control adecuado. Claro que  la prevención es lo ideal y educar al paciente y familiares es parte esencial en su tratamiento. La neuropatía diabética  es una complicación muy común  y representa el tendón de Aquiles en el cuidado de los pies en los diabéticos.
He querido iniciar una serie de artículos que considero útil para el paciente diabético,  el familiar y personal de salud en los cuidados esenciales del pie.  Iniciaré con la elección del calzado adecuado.

El paciente diabético con los años desarrollará datos de neuropatía periférica (pérdida de sensibilidad protectora). La pérdida de sensibilidad al tacto, temperatura, dolor y alta presión en zonas con deformidades óseas profundas pueden ser tan graves que los pacientes, sin darse cuenta, pueden sufrir traumas externos de cualquier tipo. No solo los pacientes que tienen deformidades óseas pueden tener zonas de alta presión, sino también los  que tienen  artritis reumatoide pueden experimentar zonas de alta presión.  Estos pacientes ajustan su marcha para evitar la dirección de la carga sobre una zona prominente y dolorosa o eligen calzado que reducirá la presión. La mayor parte de los  que sufren de neuropatía pueden desarrollar en algún momento de su vida un pie diabético o desarrollar una úlcera.  Ésta aparece en zonas de muy alta presión, que en una persona normal deberían causar solo dolor al caminar.

La elección del calzado es parte fundamental del cuidado de los pies en todo diabético.  El uso de un calzado inadecuado  puede traer como consecuencia, complicaciones devastadoras como la formación de un pie diabético.  Éste al complicarse, puede llevar a la pérdida de alguna parte del pie, de  la extremidad  completa y hasta la muerte. Todo esto producto de la neuropatía periférica.
Muy poco personal está altamente entrenado en la biomecánica del pie. la rama de las ciencias vivas a cargo de las consecuencias de las fuerzas aplicadas a los tejidos vivos.  Este campo es muy importante en el diabético debido a que la mayor parte de las úlceras  se forman por presión mecánica,   debida a la neuropatía diabética.  Muchas de las úlceras en estos pacientes pueden ser prevenidas y aún más, llegar a sanar por completo y evitar las recaídas.  La gran mayoría de las veces no se le presta la debida atención a la biomecánica debido a la poca preparación que se tiene en este campo para estos pacientes. Los aspectos biomecánicos en los diabéticos son de gran importancia debido a que abarcan las tres fases de atención: prevención primaria, curación de úlceras y prevención secundaria (prevención de recaídas). 

Para un adecuado estudio de la biomecánica del pie en los diabéticos, se recomienda iniciar  estudios sencillos como el estudio de la huella plantar, el cual nos dará una valiosa información sobre las zonas de alta presión en posición estática.  Este estudio es de muy bajo costo pero valioso, para poder así tomar medidas sobre las zonas de alta presión. Se realiza una podografía computarizada de manera estática y dinámica y se determinan las zonas de alta, moderada y baja presión.  Así se realizan los correctivos con ortesis o plantillas personificadas que pueden mejorar las presiones sobres las zonas de riesgo. En la actualidad existen modelos  donde se coloca una pequeña plantilla con dispositivos o chips que leen de manera adecuada la forma de apoyo y dinámica  del paciente.  Este dispositivo se coloca dentro del zapato del paciente y se le indica que camine de manera normal por varias horas. Durante este tiempo, el paciente puede realizar sus actividades cotidianas.    Horas después, retorna a la clínica para retirarle el chip.   Se hace un estudio y  con mayor exactitud se  realizan las descargas adecuadas en las plantillas.

La elevación de las presiones en el pie se desarrollan con el tiempo y durante la actividad de carga, la cual puede deberse a varios factores: intrínsecos,  extrínsecos y de comportamiento. Dentro de los factores intrínsecos, tenemos la arquitectura del pie, alteraciones de tejidos blandos--callos, movilidad articular limitada, deformidades--, dedos en garra, pie de charcot.  Entre los factores extrínsecos se encuentran el uso de calzado inadecuado--zapatos apretados o grandes,  con suelas duras, cirugía previa--.  Dentro de los factores de comportamiento, tenemos caminar sin zapatos, mala elección de zapatos, cuidado inadecuado de los pies--callos, corte de uñas inadecuado, patrones de caminata.
Los pacientes que han tenido úlceras en cualquier momento de su vida, deben de tener un especial cuidado en la elección del calzado por el resto de su vida. Solo cuando una úlcera ha sanado puede indicarse un calzado terapéutico definitivo. Aquellos que presentan alto riesgo, deben de seguir un especial cuidado y atención.  A menudo se considera la prescripción del calzado como una tarea que el médico delega a otros, pero en muchas situaciones,  no se dispone de asistencia especializada en el calzado. Por tanto, es de suma importancia que el médico tratante, encargado de la atención primaria del pie, tenga una idea clara de las opciones disponibles.  Afortunadamente, la gran mayoría de los pacientes pueden ser tratados exitosamente con zapatillas o zapatos muy profundos o anchos, con plantillas planas acolchonadas.  Solo un bajo porcentaje de pacientes que tengan deformidades u otros problemas, requerirán un zapato especial.

Los objetivos clínicos de la utilización del calzado adecuado es de prevenir la úlcera (atención primaria) y la recurrencia o la aparición de otra úlcera en un pie con una úlcera previa cicatrizada (atención secundaria).  Por tal motivo, todo diabético que tenga  una úlcera previa cicatrizada deberá  realizarse una podografía computarizada anual, puesto que existen cambios en la forma como apoyamos. A su vez, el calzado brindará al paciente libertad de tener una vida activa.    Mientras más activo es el paciente, más sofisticados deberán ser los zapatos. Los objetivos biomecánicos son de liberar las sobrecargas en las zonas de alta presión y poder transferirlas a otras regiones.

En conclusión, los cuidados de los pies en el paciente diabético debe ser continuo desde el diagnóstico de la enfermedad y a todo lo largo de la misma. En especial, a los pacientes que tienen deformidades y han logrado superar el desarrollo de una úlcera o pie diabético.

CUIDADOS DEL PIE DIABETICO



1.       Lávese los pies todos los días con agua tibia. Toque el agua con el codo para asegurarse de que no esté demasiado caliente. No remoje los pies. Seque los pies completamente, especialmente entre los dedos.

2.       Revísese los pies todos los días para ver si tiene alguna cortadura, lesión, ampolla, enrojecimiento, callosidades u otros problemas. Es especialmente importante revisarse los pies diariamente si tiene daño en los nervios o mala circulación. Si no puede doblarse o levantar el pie para revisarlo, use un espejo. Si su vista no es buena, pida a otra persona que le revise los pies. 

 3.   Si tienes la piel seca, úntese  crema humectante después de lavarse los pies y secarlos. No se ponga crema humectante entre los dedos de los pies. Use una piedra pómez o una lima de cartón para limar suavemente los callos y callosidades. Límeselos después de bañarse o ducharse.  

4.   Córtese las uñas de los pies una vez por semana o cuando sea necesario. Córtese las uñas cuando estén suaves después del baño. Córtelas siguiendo el contorno del dedo y procure que no queden demasiado cortas. Límese las uñas con una lima de cartón. Si no puede cortarse las uñas usted mismo, pida a otra persona que lo haga o acuda a un podólogo.
5.   Siempre use zapatos o pantuflas para protegerse los pies de las lesiones.


6. Siempre use calcetines o medias para evitar las ampollas. No use calcetines ni medias cortas que le queden demasiado apretadas debajo de las rodillas.



 7. Use zapatos que le calcen bien. Compre su calzado por la tarde, cuando los pies están más hinchados. Use los zapatos nuevos con cautela hasta que se suavicen. úselos sólo 1 ó 2 horas al día en las primeras 1 a 2 semanas. Sacuda los zapatos antes de ponérselos, las pequeñas piedras pueden causar daños.

8. Use zapatos que le queden bien. Si usted ha perdido la sensibilidad en sus pies, pida a su doctor o pediatra, un doctor especialista en los pies, consejo sobre los zapatos adecuados.

9. Pida al médico que le revise los pies en cada examen médico.

10. Mantenga controlado su nivel de azúcar en la sangre.

11. Use un espejo si no puede verse las plantas de los pies. Si se encuentra algo, póngase en contacto con su doctor -no importa que pequeño sea el problema.
12. Nunca camine descalzo.











lunes, 1 de agosto de 2011

Diabéticos usan calzado indebido

Muchos diabéticos usan calzado indebido

Puede producir ulceraciones en los pies y posteriormente, en caso extremos, la amputación del miembro afectado.
Muchos diabéticos usan calzado indebido
El uso de un calzado adecuado en pacientes con diabetes es de suma importancia, porque de lo contrario pueden aparecer heridas, úlceras dolorosísimos en los pies que en casos extremos pueden llevar a la amputación del miembro afectado.
Según los resultados de un estudio realizado por Stephen Ogedengbe, investigador de la Universidad de Benin en el Hospital Universitario de Benin City, Nigeria, y un grupo de colegas, la mayoría de los pacientes con diabetes que fueron encuestados conocen cuál es el cuidado adecuado que debe dar a sus pies y la importancia de escoger el calzado adecuado para su condición. Sin embargo, no siempre tienen en cuenta estas cuestiones.

Encuesta sobre el calzado en pacientes con diabetes

Para el estudio que fue presentado en el encuentro realizado en San Diego de la “American Association of Clinical Endocrinologists”, se encuestaron a 41 pacientes con diabetes tipo II, con un promedio de 57 años de edad, a los que se les realizaron preguntas sobre sus hábitos de calzado y cuidado de los pies.
Los investigadores encontraron que:
  • 90% de los pacientes sabían acerca de la importancia del calzado
  • 83% tenían como una práctica cotidiana el lavado y secado de sus pies
  • 51% tenía la rutina de realizarse auto exámenes de los pies
  • 56% camina siempre o de vez en cuando descalzo dentro de su casa, y un 15% también afuera, lo cual no es recomendable para las personas con diabetes por el riesgo de heridas
  • El calzado del 68% de los participantes era inadecuado (zapatos con punta fina, de tacones altos, con correas, sandalias, chinelas o de tamaño equivocado)
  • El 73% de los pacientes creía que su calzado era aceptable

Recomendaciones sobre el calzado para pacientes con diabetes

  • Evitar los zapatos de punta
  • Escoger los que tienen plantillas blandas
  • No utilizar zapatos con taco muy bajo o alto, ya que no permite una distribución uniforme de la presión del pie
  • Escoger zapatos de cuero, gamuza, tela o materiales que permitan una circulación adecuada del aire y no plástico u otros que no dejan respirar al pie
  • Elegir zapatos con características tales como hebillas, cordones, velcro, que facilitan el ajuste de los mismos

Otra opinión en la misma línea

David G. Armstrong, profesor de cirugía y director del Sur de Arizona Recuperación del Miembro de la Alianza en la Universidad de Arizona Colegio de Medicina, en Tucson y miembro de la junta de asesoramiento científico para Vasyli, un fabricante de aparatos ortopédicos, dice que este estudio confirma lo que él venía observando ya con los pacientes diabéticos. Los médicos hacen ciertas recomendaciones a los pacientes con respecto al cuidado de sus pies y al calzado, pero eso no implica que necesariamente las sigan.
Según él, lo que podría ayudar es informar a las personas diabéticas que el riesgo de úlceras en los pies es de, aproximadamente, según la Asociación Americana de Diabetes del 25%.
El uso de zapatos adecuados puede reducir ese riesgo y prevenir la la neuropatía diabética (daños a los nervios de los pies y pérdida de la sensibilidad).
Diariamente higienizar y revisarse los pies, anualmente concurrir al médico, visitar a un podólogo y utilizar un calzado adecuado puede prevenir ulceraciones en los pies y potenciales amputaciones